martes, 23 de febrero de 2010

Tocapelotas

Mañana me toca mover el culo otra vez, de mi nidito de toda la vida, a casi el Polo Norte.

A veces pienso que estoy siendo una gilipollas con creces. Siempre tengo que moverme yo por los demás, incluído mi novio. Sí, te quiero, y estoy haciendo todo ésto por tí y más aún, pero si tanto me quieres tú a mí, ¿por qué no te pasas tu trabajo por el forro de los cojones por un mes y vienes a verme a mí AQUÍ?. Yo ya perdí un año entero de clases, de estar con mi familia, de ser vaga aunque estuviera yendo a clases, de disfrutar con mis amigos de todo lo que hacemos aquí, pero lo que más me fastidia, es que no he ganado nada en un año, sino más dolores que provechos, más cosas que me fastidian de las que me agradan, dos maletas por las que pagar sobrepeso y un polvo en la noche de llegada. De verdad, ¿qué coño te esperas tú de mí?. ¿Qué pretendes que haga?.

Todos cometemos errores, nadie es perfecto, pero hay algunas veces en las que cuando te cansas de luchar, te cansas de verdad. I give up. No tengo ganas de irme, ni las más mínimas, no tengo ni putas ganas de saber que voy a estar volando nueve horas y media para saber si alomejor me aceptan en una universidad o no, para ver si me dan un trabajo o no, ¿sabes qué?, como la cosa salga mal, te vas a quedar compuesto y sin novia, que estoy hasta los cojones de haber tenido que tirar la casa por el balcón y que tú todavía no lo hayas hecho. Aprende español, deja de hacer el gilipollas, yo estuve toda una vida aprendiendo inglés y sacándome todos los títulos que pude. Hazlo tú de una puñetera vez, porque ésta que lo es, volverá en Agosto como muy tarde, y aquí me voy a quedar, igual que tú, esperando de brazos cruzados, a ver si te dignas a moverte y hacer algo, porque éste va a ser mi último viaje a Canadá como me sigas tocando la moral y apartándome de las cosas que yo también quiero y estimo.

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